Robo de catalizadores, un negocio sin control
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El Diario de SonoraEl robo de catalizadores de todo tipo de vehículos está en aumento en Nogales, así lo reconocen las autoridades locales y lo confirman algunos comerciantes como “mofleros” y dueños de recicladoras de esta frontera, que se dedican a la reparación o compra y venta de esta pieza.
La venta ilegal o informal de este tipo de filtro automotriz se da por la obtención de los metales como el rhodio, paladium o platino, y su precio depende de la cotización a nivel internacional de estos metales.
Los reportes de robo de catalizadores de las últimas fechas se concentran en comercios ubicados al sur de la ciudad, así como en Las Bellotas, Luis Donaldo Colosio, Nuevo Nogales, entre otras colonias, con base en información de Seguridad Pública.
“El robo de catalizadores es un fenómeno nuevo que se está llevando a cabo aquí en Nogales, es parte de la crimogénesis, no habíamos tenido ese fenómeno, sabemos se da en diferentes partes de la república”, citó el anterior Jefe de Seguridad Pública Municipal, Alberto López Rodríguez, a escasos días de dejar su cargo.
Mientras que el actual Jefe de Seguridad, Eduardo Martínez Zubieta, señala que se tiene conocimiento del incremento en el robo de catalizadores de automóviles y se está trabajando ya con los recorridos en las zonas registradas con mayor incidencia.
“Hemos estado teniendo algunos reportes lo que es en sectores de la colonia Nuevo Nogales y Las Bellotas, por lo cual ya se reforzaron los recorridos de seguridad en esos lugares y en esta operatividad contamos con el apoyo del grupo operativo GOT.
En lo que tenemos ahorita al cargo tenemos alrededor de siete denuncias por robo de catalizadores en distintos sectores de la ciudad, donde ya reforzada la seguridad han disminuido”, comenta.
Comercialización al alza: Moflero
Don Juan, propietario de un negocio de instalación de mofles, ubicado en esta ciudad, explicó que desde hace varios años se incrementó la comercialización de los catalizadores, pero anteriormente el mismo propietario del vehículo acudía a vender su pieza automotriz.
Dijo que la causa principal era porque ya cumpliendo su ciclo de uso, que va de 5 a 10 años según la marca del carro, la función del catalizador termina y se convierte en un problema para el desempeño de cualquier automóvil por lo que el mismo mecánico recomienda quitárselos.
Mencionó que de esta forma dejan de gastar más gasolina son menos pesados y funcionan mejor, aunque con ello se sabe que ya no filtran las emisiones de gases contaminantes.
Explicó que hace relativamente poco, las recicladoras ‘foráneas’ empezaron a ofrecer cada días más dinero por estas piezas, al grado de que muchos mofleros se dedicaron a comprarlos y ofertarlos dependiendo la marca o serie del catalizador.
Sin control de venta
La venta de catalizadores está en crecimiento debido al aumento en la demanda a nivel mundial de la obtención de metales como el rhodio, paladium o platino; metales que tienen dentro estos catalizadores, señala propietario de conocida recicladora, que pidió no manejar su nombre.
El entrevistado señala que no existe un control oficial o medio que asegure la venta controlada de estos artefactos, pues sería muy difícil exigir al vendedor una factura o comprobante legal de cada uno de ellos, ya que se compran por grandes cantidades.
Explica que un solo cliente puede llegar con una camioneta con varios de estos catalizadores, “la mayoría son mofleros que tienen sus comercios bien establecidos en la ciudad, incluso muchos son personas que solo se dedican a comprarlos, es decir, no hacen arreglos al sistema de escape y después nos los revenden”.
Para el comerciante, el negocio recae en comprar todos los catalizadores posibles con base en la serie o modelo, que ya se saben que contiene mayor cantidad de metales, para extraerlos y venderlos.
“La verdad es que no tenemos idea de cuántos de estos podrían haber sido robados o fueron vendidos por los propietarios de los mismos vehículos”, señala.
Mientras tanto
La falta de regulación en la venta de catalizadores, como otros objetos que terminan en las recicladoras, permite la comercialización ilegal y el robo en detrimento a la comunidad.
El jefe policiaco señala que, con el fin de evitar que siga creciendo este delito, tendrán un acercamiento con los propietarios de chatarreras, recicladoras y otros comercios que están comprando esta autoparte.
“Ya nos estamos agendando para tener una plática con ellos y decirles lo que está sucediendo y lo que puede suceder en caso de que sean sorprendidos comprando catalizadores robados”, agrega.
Datos
La reparación de un sistema de escape averiado (robo de catalizador) oscila entre los 300 y 550 pesos, según el tipo o modelo del vehículo, es decir, depende del tamaño del tubo que se le tenga que soldar para reparar el daño.
Los catalizadores más baratos superan los mil 300 pesos y pueden llagar a costar en este mercado callejero hasta más de 15 mil pesos.
Hay vehículos como las vagonetas o algunos sedán que tienen hasta cuatro tipo de catalizadores en su sistema de combustión de gases o de escape, por lo que las personas que los venden podría obtener hasta 8 mil pesos o más dependiendo la serie y el modelo de los catalizadores de su vehículo.
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