TOKIO, JAP
El de los reactores uno a cuatro ya esta en curso y ahora se suman dos más reportan.
El primer ministro japonés Shinzo Abe urgió a la Tokyo Electric Power (Tepco) a desmantelar los reactores cinco y seis de su planta de Fukushima Daiichi y priorizar la atención a la fuga de agua radiactiva.
El jefe de gobierno japonés visitó esta jueves la central nuclear afectada por el sismo y posterior tsunami de marzo de 2011, fenómenos naturales que crearon uno de los peores accidentes nucleares en el mundo.
Esta visita, la segunda en la gestión de Abe, se da a dos semanas de que el funcionario asegurara que los daños en la instalación nucleoeléctrica estaban “bajo control”.
El desmantelamiento de los reactores uno a cuatro ya estaba en curso por parte de Tepco, operadora de las instalaciones, y ahora se suman dos más, reportó un despacho de la agencia Kyodo.
Fukushima vierte a diario 300 toneladas de agua radiactiva al océano Pacífico debido a la acumulación del líquido en los sótanos de los reactores, proveniente de su sistema de refrigeración,y se suma a la filtración de los acuíferos naturales bajo la planta.
Abe dijo a los periodistas que lo acompañaron a la central, que el presidente de Tepco, Naomi Hirose, se comprometió a resolver su petición este mismo año.
El jefe de gobierno también instruyó a Tepco para que sea su prioridad el problema del agua tóxica, y la responsabilizó de manejar el problema, mientras afirmó que el gobierno va a jugar un papel importante en la limpieza.
La visita de Abe forma parte de una campaña destinada a tranquilizar a la opinión pública mundial sobre el estado de la planta, en el marco de la obtención de la sede de los Juegos Olímpicos de 2020 .
El primer ministro vistió un traje de protección para inspeccionar la labor que se lleva a cabo en los tanques de almacenamiento de agua contaminada, así como en los sistemas de descontaminación.
También se reunió con el personal que trabaja para limpiar el peor desastre nuclear en un cuarto de siglo.
Japón ignoró pedido de EU
Las autoridades japonesas, que ahora tienen dificultades para contener filtraciones de agua radiactiva en la planta nuclear de Fukushima, recibieron pedidos de expertos estadunidenses hace dos años para que tomaran medidas inmediatas para prevenir la contaminación pero decidieron no aceptarlos.
La sugerencia al operador de la planta fue presentada en un memo enviado al Gobierno japonés apenas dos meses después del accidente que sufrió Fukushima pero más tarde fue archivada, de acuerdo a dos funcionarios que participaron en las discusiones y documentos preparados por ambos gobiernos y por el operador.
Tokyo Electric Power (TEPCO) llevó a cabo una campaña exitosa para desestimar la propuesta de erigir un muro de contención en torno a la planta, debido a que su costo habría desatado especulaciones que la habrían llevado a la bancarrota.
Un portavoz de TEPCO dijo que hubo preocupaciones sobre la viabilidad de la propuesta para bloquear el flujo de agua hacia los reactores, además de temores por el impacto sobre la confianza de los inversores.
Los problemas para contener el agua contaminada han aumentado y el gobierno del primer ministro Shinzo Abe ha prometido alrededor de 470 millones de dólares para financiar un plan destinado a evitar que el agua radiactiva llegue al océano Pacífico.