Washington, dc
La mujer sospechosa murió abatida por la policía fuera del edificio del Capitolio.
Una mujer que conducía un automóvil de color negro con un infante a bordo trató de cruzar una barricada instalada en las afueras de la Casa Blanca el jueves y luego provocó una persecución con la policía que terminó en un tiroteo frente al Capitolio en el cual murió, dijeron testigos y funcionarios.
Turistas que se encontraban en la ciudad observaron el tiroteo que tuvo lugar frente al Capitolio, en momentos en que los legisladores debatían en el interior del recinto cómo terminar el cierre parcial del gobierno.
La policía rápidamente cerró el complejo legislativo por una hora aproximadamente, y tanto el Senado como la Cámara de Representantes declararon un receso.
La policía disparó contra el vehículo. Las autoridades efectuaron técnicas de resucitación cardiorrespiratoria durante varios minutos a alguien cerca del lado del conductor del vehículo, y luego retiraron a esa persona del lugar.
El representante Michael McCaul, quien dijo que fue informado por el Departamento de Seguridad Nacional, dijo que la mujer murió. Al preguntarle si iba armada, respondió: “No lo creo. No hubo disparos de respuesta”.
La policía describió el incidente como un hecho aislado y no vio indicios de terrorismo.
La persecución comenzó cuando un automóvil con placas de Connecticut aceleró sobre la vía que lleva a la Casa Blanca, por encima de un juego de barreras pequeñas. Cuando no pudo atravesar la segunda barrera, dio vuelta y arrolló a un oficial del Servicio Secreto y se alejó, dijo B.J. Campbell, un turista.
Testigos del hecho dijeron que al menos 20 carros de policía persiguieron al auto negro de marca Infiniti cuando iba camino al Capitolio, donde finalmente se estrelló.
Un turista, Edmund Ofori-Attah, dijo que se acercó al lugar de los hechos porque tuvo curiosidad de lo que estaba pasando.
“Entonces oí los disparos”, y me tiré al suelo, dijo.
Terrance Gainer, sargento de la seguridad del Senado, dijo que una mujer que conducía el automóvil, que salió de él y dejó a su hijo en su interior.
Ofori-Attah dijo que el niño parecía tener entre 2 a 3 años de edad.
Gainer dijo que el niño fue llevado a un hospital.
El jefe de la policía del Capitolio, Kim Dine, dijo que la conductora del coche se encontraba bajo custodia pero no dio a conocer su estado de salud.
Un policía resultó herido en el accidente provocado por la mujer, pero Gainer dijo que las heridas no eran graves.
La policía ordenó a Casey y a los turistas que transitaban por el lugar que se escondieran detrás de un coche para protegerse. Luego, apresuró a otras personas adentro del Capitolio.
“Se hicieron varios disparos y el aire se llenó de pólvora”, dijo Berin Szoka, cuya oficina en una empresa de tecnología tiene una vista al lugar.
Estos hechos ocurren dos semanas después de un tiroteo en el Astillero Naval, que es vecino del Capitolio, y en medio de un cierre parcial del gobierno.
Tan pronto sonó una alarma, los legisladores de la Cámara de Representantes fueron abruptamente a receso y los representantes salieron del recinto de la plenaria. La cámara baja acababa de aprobar una ley que ayudaba a permitir abrir parcialmente el gobierno autorizando el pago de los salarios de los miembros de la Guardia Nacional y los reservistas.
La gente que se encontraba frente a la Corte Suprema, al otro lado de la calle, fue obligada por las autoridades a entrar al edificio de la corte.
La Casa Blanca también fue cerrada rápidamente después del incidente, y el tramo de la avenida Pensilvania, al frente de este edificio, fue cerrado a los peatones. El Servicio Secreto dijo que tomaron esas medidas por precaución.