Manila, Filipinas.
El Consejo Nacional de Gestión y Reducción de Desastres de Filipinas elevó hoy a 185 el número de muertos en el terremoto de 7,2 grados de magnitud que sacudió el pasado martes la región de Visayas, en el centro del país.
En su último informe, el organismo apunta además que al menos 583 personas resultaron heridas mientras otras nueve permanecen desaparecidas en la isla de Bohol, donde se registró el epicentro del sismo.
Bohol es el lugar que más muertes registra con 172, mientras que otras 12 personas murieron en Cebú y otra en Siquijor.
Más de 3,4 millones de personas de siete ciudades en tres provincias distintas se han visto afectadas por el movimiento telúrico, el más intenso que ha vivido Filipinas en los últimos 20 años.
Las autoridades rebajaron de 34 mil a ocho mil 480 el número de casas afectadas por el terremoto, cuyos daños materiales suben a unos 550 millones de pesos (12.7 millones de dólares).
Un total de 17 iglesias históricas resultaron dañadas, entre ellas la Basílica Menor del Santo Niño, en Cebú, considerada el monumento más antiguo de la Iglesia católica apostólica romana del país y que data del siglo XVI.
Filipinas se asienta sobre el llamado “Anillo de Fuego del Pacífico” , una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por unos siete temblores al año, la mayoría moderados.