Washington, DC
El vicepresidente de Estados Unidos estará en Kiev para analizar la situación que hay en Crimea.
El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, viajará a Ucrania el próximo 22 de abril para reunirse con líderes gubernamentales y miembros de la sociedad civil, anunció la Casa Blanca.
Durante su visita a Kiev, Biden “resaltará el fuerte apoyo de Estados Unidos para una democrática y unida Ucrania que tome sus propias decisiones sobre su trayectoria futura”, indicó la Casa Blanca en un comunicado.
Biden consultará con funcionarios locales sobre los esfuerzos para fortalecer la economía de Ucrania, así como para ayudar a que se aprueben reformas constitucionales, descentralización, se emprendan esfuerzos anticorrupción y se realicen elecciones presidenciales libres y justas el próximo 25 de mayo.
El vicepresidente también discutirá los recientes acontecimientos en el este de Ucrania, donde separatistas rusos, “aparentemente con el apoyo de Moscú, continúan una campaña orquestada de incitación y sabotaje para desestabilizar el Estado ucraniano”, sostuvo la Casa Blanca.
Biden ha estado profundamente involucrado en los esfuerzos diplomáticos de Estados Unidos en Ucrania desde que estallaron las protestas en Kiev en noviembre pasado y que meses después terminaron con la salida del presidente Yanukovich del poder.
El vicepresidente será el funcionario de más alto nivel en visitar Ucrania desde que comenzó la crisis en esa nación europea.
El secretario de Estado John Kerry visitó Kiev a principios del mes pasado para mostrar su apoyo a los líderes de Ucrania después de que Moscú tomara el control de la región de Crimea.
El anuncio de la Casa Blanca se produce cuando las autoridades ucranianas ya preparan “un operativo de respuesta” para recuperar los bastiones prorrusos del este, después de que los separatistas tomaran comisarías, ayuntamientos y cruces de carretera.
Activistas prorrusos han tomado este sábado la sede del Departamento del Ministerio del Interior de Ucrania para la región de Donetsk, en el sureste del país, de mayoría rusoparlantes.
También han asaltado cuatro comisarías en diferentes ciudades del sureste de Ucrania. La última se produjo en el cuartel de Kramatorsk, a 150 kilómetros de la frontera con Rusia.