Washington, DC
El presidente estadunidense llamó a la reflexión y el entendimiento.
El presidente Barack Obama rompió el silencio en torno al asesinato del adolescente afroamericano Michael Brown a manos de un policía, y llamó a la calma luego de protestas callejeras y saqueos motivados por el episodio.
Obama, quien vacaciona en la exclusiva zona de Martha’s Vineyard, en Massachusetts, pidió a los residentes del estado de Missouri, donde se registró el incidente, y a la población en general, a realizar acciones que sanen las heridas por la muerte del joven.
Sé que los eventos de los últimos días han dado pie a fuertes pasiones, pero conforme transcurren las cosas, les pido a todos en Ferguson, Missouri, y en el todo el país, a recordar al joven a través de la reflexión y el entendimiento”, dijo el presidente.
Brown, de 18 años, recibió múltiples disparos en un supuesto altercado con la policía en Ferguson, suburbio de Saint Louis, Missouri, lo que desató violentos disturbios y saqueos a comercios en el área.
Cientos de residentes realizaron protestas pacíficas, con las manos en alto, para llamar la atención ante lo que consideran un acto de abuso de la fuerza policial contra el joven afroamericano, quien se encontraba inerme.
El procurador general de Estados Unidos, Eric Holder, señaló la víspera que el incidente en Missouri amerita una investigación adicional a la que realizan autoridades policiales locales.
El incidente a tiros en Ferguson, Missouri, de este fin de semana, merece una revisión exhaustiva adicional a la investigación local”, señaló Holder en un comunicado.