AUSTIN, TX.
El gobernador de Texas fue encausado en agosto pasado por vetar el financiamiento de una unidad de la fiscalía.
Un juez de Texas se negó a desestimar por tecnicismos dos encausamientos por abuso de poder contra el gobernador Rick Perry, fallando que el caso contra el posible candidato republicano a las elecciones de 2016 debe continuar.
La defensa del gobernador trató de que se desestimara el caso, alegando que el fiscal especial que encausó al gobernador no fue juramentado debidamente y que algunos de los documentos no se presentaron según las normas.
Pero en una decisión de 18 páginas emitida el martes, el juez de distrito Bert Richardson, quien al igual que Perry es republicano, le dio la razón al fiscal Michael McCrum.
Perry fue encausado en agosto, acusado de amenazar con vetar, y más tarde cumplirlo, el financiamiento a la unidad de la fiscalía dedicada a combatir la corrupción pública después que el demócrata que dirigía el grupo no renunció tras ser declarado culpable de conducir en estado de ebriedad.
Los abogados de Perry también han cuestionado la constitucionalidad del caso. No se espera una decisión hasta dentro de varias semanas.