Ambos países acordaron fortalecer la colaboración con la operación denominada "Frozen"
CIUDAD DE MÉXICO
Excélsior
Los gobiernos de México y Estados Unidos acordaron fortalecer la colaboración a partir del arranque del operativo denominado "Frozen", con el objetivo de congelar el tráfico de armas que ingresa a nuestro país por la frontera común y que en gran medida, son las que utilizan los integrantes del crimen organizado.
"Habrá un antes y un después de la llamada del sábado entre los presidentes López Obrador y Trump en esta materia", destacó el canciller Marcelo Ebrard.
En el encuentro que se desarrolló en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, participaron el titular de la SSPC, Alfonso Durazo Montaño, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon; el titular de la SEDENA, Luis Cresencio Sandoval; el secretario de Marina, José Rafael Ojeda; el comandante de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio y el director general del Centro Nacional de Inteligencia, Audomaro Martínez Zapata.
Por parte de los Estados Unidos, participó el embajador Christopher Landau, así como personal de la Agencia para el Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, el Departamento de Justicia, el Departamento de Seguridad Nacional, incluyendo su Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza y su Agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional, el Departamento de Defensa, el Buró Federal de Investigación y la Sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley del Departamento de Estado.
En la reunión del Subgrupo Binacional sobre Tráfico de Armas, las autoridades mexicanas informaron sobre la situación actual en la zona fronteriza y los esquemas de coordinación e intercambio de información para atender el flujo de armas en las aduanas terrestres, marítimas y aéreas.
Por su parte, los representantes estadounidenses comprometieron el esfuerzo de su gobierno para enfrentar de manera firme el tráfico de armas que opera de manera trasnacional y reiteraron su disposición de trabajar en planes de acción conjuntos y maximizar la eficacia de los esfuerzos a través de la inteligencia.
Hay voluntad política para enfrentar el reto compartido", señaló el embajador Christopher Landau.
De acuerdo con el comunicado de la SSPC, los asistentes acordaron tener reuniones ejecutivas cada 15 días; desburocratizar las respuestas institucionales, y sellar las fronteras, cada país desde sus responsabilidades y en un ámbito soberano.
El cónclave se desarrolló a cuatro días de ocurridos los hechos violentos en Culiacán, Sinaloa, tras el fallido operativo en el que se detuvo y posteriormente se dejó en libertad a Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín "El Chapo" Guzmán.
La estrategia pactada entre ambos gobiernos buscará frenar el paso de armas ilegales a México por la frontera norte, particularmente en cinco cruces: San Diego-Tijuana; El Paso-Ciudad Juárez; Laredo-Nuevo Laredo; McAllen-Reynosa y Brownsville-Matamoros.