Un niño de tres años estuvo en terapia intensiva en una clínica de Neuquén, Argentina, después de estuviera seis horas encerrado en un automóvil, debido a que sus padres "olvidaron llevarlo a la guardería". Después de que los médicos intentaran estabilizar al pequeño por 8 días consecutivos, no hubo éxito y se produjo su deceso.
Los informes policiales revelan que en el trágico incidente, la madre del pequeño se percato de la situación al regresar al automóvil estacionado sobre calle Chrestia al 550 y encontrar al niño desmayado en el asiento trasero. De inmediato, solicitó ayuda, y las Comisarías Primera y Cuarta de la Región respondieron rápidamente acudiendo al lugar.
En el lugar, se llevaron a cabo las maniobras de reanimación correspondientes, pero al no obtener resultados positivos, optaron por trasladarlo. En primera instancia, fue llevado a la clínica San Agustín y posteriormente al San Lucas. Permaneció entubado y bajo cuidados intensivos en la unidad de terapia.
Por otro lado, la policía de Neuquén comunicó, que los padres informaron que el niño había estado encerrado entre las 9 y las 15 horas, y que "se olvidaron de llevarlo a la guardería". A través de las cámaras de seguridad de la zona, se pudo verificar el momento en que los padres dejaron el automóvil para dirigirse a sus trabajos.
El material fílmico "será analizado", ya que el niño presenta moretones, lo que sugiere la posibilidad de violencia previa. Natalia Stornini, defensora de los derechos de la niñez y adolescencia explicó que en estos casos en donde un niño termina internado se "entiende que hubo negligencia y abandono".
También agrega: "La prioridad es la salud del niño y evaluar el impacto en la salud tanto física como psicológica", además remató que se pudo haber cometido un hecho delictivo. Ante esa posibilidad, intervino el Ministerio Público Fiscal, mismos que evaluaron la situación familiar.
Stornini, añade que en la medida que haya derechos vulnerados, se seguirá hasta el despeje de la situación y las evaluaciones que se lleven a cabo. El caso lo investiga la fiscal Valeria Panozzo. Entre las medidas, se solicitó las grabaciones de las cámaras de seguridad del lugar y que el cuerpo médico forense del poder judicial evalúe si puede realizar una pericia médica al niño.