El Condado de Los Ángeles cerró una unidad de tratamiento de adicciones en el centro de detención juvenil Barry J. Nidorf en Sylmar pocos meses después de su apertura, debido a preocupaciones sobre la colocación involuntaria de jóvenes en el programa.
La Unidad de Trastornos por Uso de Sustancias, implementada en 2023 tras una sobredosis mortal y múltiples hospitalizaciones en instalaciones juveniles, proporcionaba supervisión y programación intensiva para jóvenes con adicciones.
El condado se asoció con el Centro de Tratamiento Tarzana para este programa piloto, pero en mayo, los jóvenes fueron retirados a petición propia y las colocaciones involuntarias se detuvieron hasta resolver la disputa, según el Departamento de Libertad Condicional.
La unidad enfrentó oposición de los defensores, particularmente de la Oficina del Defensor Público, quienes argumentaron que el Departamento de Libertad Condicional utilizó evaluaciones de riesgo desactualizadas de 2023 para determinar las colocaciones, sin reevaluar adecuadamente las necesidades actuales de los jóvenes.
Los jóvenes enviados a la unidad la consideraron demasiado restrictiva y se quejaron de la falta de actividades disponibles en otras partes del centro. A pesar de la oposición al proceso de colocación, la Oficina del Defensor Público apoya el concepto detrás de la unidad y espera trabajar con el Departamento de Libertad Condicional para satisfacer las necesidades de tratamiento de los jóvenes.
El Departamento de Libertad Condicional no especificó cuántos jóvenes fueron colocados en la unidad o si alguno permanece. Un portavoz indicó que la unidad está abierta para jóvenes que deseen participar voluntariamente en consejería y tratamiento intensivo.
El jefe de libertad condicional, Guillermo Viera Rosa, reconoció que se cometió un error al cerrar la unidad y expresó la intención de reabrirla considerando las recomendaciones de la corte y el defensor público.
La supervisora Kathryn Barger, impulsora de la creación de la unidad, expresó su decepción por el cierre, señalando que la unidad fue creada en respuesta a numerosas sobredosis en las instalaciones juveniles.
El Barry J. Nidorf Secure Youth Treatment Facility en Sylmar alberga a unos 60 jóvenes adjudicados por crímenes graves. El año pasado, la instalación enfrentó una crisis de consumo de drogas, con varios incidentes de sobredosis y hospitalizaciones. Desde entonces, el departamento ha intensificado las medidas de seguridad y ha suspendido a varios oficiales por intentar introducir contrabando en las instalaciones juveniles.