Amanda Knox: de nuevo en el banquillo; condenada por difamación en Italia por acusar a un hombre inocente en el asesinato de su compañera de cuarto en 2007.

Amanda Knox, de 36 años, llegó visiblemente molesta al tribunal de Florencia, en lo que fue apenas su segunda visita a Italia desde su liberación en 2011. Fue sentenciada a tres años de prisión por acusar falsamente a un propietario de bar de matar a su compañera de cuarto, Meredith Kercher, de 21 años, en un intento por limpiar su propio nombre en el impactante caso de asesinato.

A pesar de la condena, Knox no tendrá que cumplir más tiempo en prisión, ya que se considera que ha cumplido su condena. Aunque se secó las lágrimas a su llegada al tribunal, no mostró emoción visible cuando se leyó el veredicto en voz alta.

Los abogados de Knox expresaron su frustración ante el veredicto. Carlo Dalla Vedova comentó: "Está muy molesta, buscaba tener un punto final de todo esto, 17 años ahora, procedimiento judicial". Mientras que Luca Luparia Donati dijo que "Amanda se siente muy amargada" por la situación.

Antes de la audiencia, Knox recurrió a las redes sociales para expresar su deseo de "limpiar mi nombre de una vez por todas de las falsas acusaciones en mi contra. Deséenme suerte". Desde el arresto de Knox y su entonces novio, Raffaele Sollecito, por el asesinato de Kercher en 2007, la historia ha mantenido a Knox en el ojo público.

La montaña rusa legal de ocho años que siguió a los eventos de 2007 incluyó múltiples veredictos cambiantes, con Knox siendo condenada por asesinato y difamación en diferentes momentos. Sin embargo, después de cumplir cuatro años de prisión, fue finalmente liberada en 2011 tras la anulación del veredicto de culpabilidad inicial.

Knox permaneció en Estados Unidos durante los siguientes veredictos cambiantes, hasta que en 2015 el tribunal más alto de Italia finalmente la exoneró, poniendo fin a una saga legal que ha capturado la atención internacional durante más de una década.