La seguridad de un expresidente en campaña es una cuestión que ha generado gran debate, y en este caso, se ha llegado a medidas inusuales. El Servicio Secreto de Estados Unidos, habitualmente dedicado a la protección de presidentes en ejercicio, ha implementado un protocolo especial para los eventos de campaña del expresidente Donald Trump, incluyendo la utilización de vidrio a prueba de balas.
Esta medida, normalmente reservada para presidentes en funciones, se ha tomado tras el primer intento de asesinato de un candidato presidencial desde el incidente con George Wallace en 1972. El Servicio Secreto se ha visto obligado a tomar acciones drásticas luego del tiroteo en Butler, Pensilvania, donde un hombre armado disparó desde una azotea a 120 metros del escenario, hiriendo a un miembro de la audiencia y causando la muerte de otra persona.
El uso por parte del Servicio Secreto de vidrios blindados UpArmored alrededor del expresidente Trump es otro paso para garantizar que la campaña esté y siga estando segura, dijo un agente retirado del Servicio Secreto.La complejidad del protocolo de seguridad ha obligado al Servicio Secreto a realizar una logística sin precedentes, incluyendo el transporte de varios juegos de vidrio blindado en camiones por todo el país.
Aunque Trump ha expresado su deseo de realizar eventos de campaña al aire libre, el Servicio Secreto ha reforzado las medidas de protección, no solo para él, sino también para la vicepresidenta Kamala Harris, sus compañeros de fórmula y otros protegidos.