Un error administrativo en el Mercy San Juan Medical Center de Sacramento, California, ha dejado a una familia en un estado de angustia inimaginable. Jessie Marie Peterson, de 31 años, fue declarada muerta el 8 de abril del 2023, pero su cuerpo permaneció en una unidad de almacenamiento en frío del hospital durante casi un año.
La familia de Peterson, preocupada por su ausencia, buscó incansablemente por ella. Reportaron su desaparición, colocaron carteles por la ciudad y hasta entrevistaron a personas sin hogar, todo con la esperanza de encontrar a su ser querido. Lo que no sabían era que Peterson estaba a solo unos pasos de ellos, en una unidad de almacenamiento dentro del hospital.
La tragedia no terminó ahí. Cuando las autoridades finalmente encontraron el cuerpo de Peterson, el avanzado estado de descomposición impidió un funeral con ataúd abierto e incluso la obtención de huellas dactilares como recuerdo. La familia presentó una demanda civil en contra del hospital, buscando $25 millones por la negligencia que, según ellos, provocó este calvario.
El abogado de la familia, Marc Greenberg, señaló que "el hospital Mercy San Juan no cumplió con su deber más fundamental de notificar a la familia de Jessie sobre su muerte". El hospital se jacta de tratar a sus pacientes con dignidad y respeto, mientras que la familia de Peterson busca justicia por la falta de sensibilidad que ha marcado esta tragedia.