A veces, la creatividad nos lleva por caminos inesperados, y en este caso, una mujer de Santa Bárbara demostró que la astucia también puede ser una herramienta eficaz para combatir la delincuencia. Harta de que le robaran paquetes de su buzón de correos, esta mujer decidió tomar cartas en el asunto. Con ingenio, empleó un AirTag de Apple, un dispositivo que se ha vuelto popular por ayudar a los usuarios a rastrear cualquier cosa, desde llaves perdidas hasta equipajes.
El AirTag, disimulado dentro de un paquete en su buzón, se convirtió en un testigo silencioso. La mujer, cansada de las constantes desapariciones de sus envíos, decidió enviar el AirTag a su propia dirección, esperando que el ladrón cayera en la trampa.
Y así fue. El lunes por la mañana, los agentes del alguacil acudieron a la oficina postal de Los Álamos, donde la mujer informó del nuevo robo. El AirTag, que había sido rastreado hasta una cuadra en Santa María, a 16 millas de distancia, reveló la ubicación del supuesto ladrón.
Gracias a la astucia de la víctima y a la tecnología del AirTag, los agentes lograron detener a dos sospechosos: una mujer de 27 años de Santa María y un hombre de 37 de Riverside. Entre las pertenencias de la víctima y del sospechoso, encontraron el paquete con el AirTag, junto con artículos que se creen que fueron robados a más de una docena de personas. La víctima, quien prefirió mantenerse en el anonimato, demostró que la creatividad y la tecnología pueden ser herramientas valiosas para combatir la delincuencia.