Deltona, un condado cerca de Dallas, en Florida, tiene planteles escolares donde los niños suelen disfrutar sus días con alegría. Sin embargo, la paz de la escuela primaria Forest Lake se vio interrumpida por un incidente que ha dejado a la comunidad conmocionada. Vilma 'N', una maestra de 59 años, fue arrestada y acusada de abuso tras un presunto estrangular a un niño de tres años con autismo.
Según el reporte de la policía, una educadora que trabaja con la acusada en el salón de clases presenció el incidente. Narró que ella se encontraba leyendo a los niños cuando escuchó el grito y llanto del pequeño. Al voltear, vio al niño siendo sujetado por la acusada entre sus piernas, en lo que parecía ser un estrangulamiento.
Inmediatamente tomó fotos de la situación y reportó el incidente al Departamento de Niños y Familias (DCF). Los agentes del sheriff encontraron al niño visiblemente alterado y con un ligero enrojecimiento en el cuello. El pequeño, al ser cuestionado, declaró que "se había metido en problemas en la escuela" y que "ella lo había lastimado".
Vilma, con 36 años de experiencia como maestra, la mayoría dedicados a niños con necesidades especiales, admitió que la acción descrita sería inapropiada, pero negó haberla realizado. Incluso al ser confrontada con la evidencia fotográfica, se mantuvo firme en su negativa.
La comunidad educativa espera que la justicia se imparta con rigor y que este incidente sirva como un recordatorio para proteger a los más vulnerables.