Durante una audiencia en la Corte de Distrito Este de Nueva York, "El mayo" Zambada se declaró "no culpable" de los 17 cargos en su contra. Entre los cargos más graves se encuentran el tráfico de drogas, incluyendo fentanilo, dirigir una organización criminal, uso de armas y lavado de dinero.
Este caso no es nuevo para Zambada, quien fue acusado formalmente por primera vez en 2009 y ha enfrentado cargos en al menos 16 ocasiones desde entonces. El juicio es parte de un caso mayor, USA v. Beltran-Leyva et al, que involucra a otros líderes del Cártel de Sinaloa, como Joaquín "El Chapo" Guzmán y Jesús Zambada-García, hermano de Zambada.
El documento judicial presentado por los fiscales detalla el ascenso de Zambada en la Federación Mexicana, una organización de tráfico de drogas que ha operado desde finales de la década de 1980. Se menciona que el Cártel de Sinaloa, bajo el liderazgo de Zambada y Guzmán, ha importado grandes cantidades de narcóticos a los Estados Unidos y ha lavado miles de millones de dólares.
La relación entre Zambada y Guzmán también está ligada a varios conflictos violentos con grupos rivales por el control del tráfico de drogas en México. Según las autoridades estadounidenses, la alianza entre ellos contribuyó a la reputación del Cártel de Sinaloa por su violencia y actividades criminales.
Zambada enfrenta la posibilidad de cadena perpetua debido a la gravedad de los cargos. Si bien podría negociar con las autoridades federales para obtener condiciones más favorables, su perfil de alto riesgo y su reputación como una figura peligrosa para la comunidad han sido destacados en el documento judicial.
Cabe destacar que su hijo, Vicente Zambada Niebla, conocido como "Vicentillo", ya ha llegado a acuerdos con las autoridades y actualmente se encuentra en libertad.