La ciudad, conocida por su vibrante vida universitaria, se vio envuelta en un clima de tensión, con las autoridades locales en alerta máxima ante la posibilidad de incidentes. El foco de atención se centró en un evento político que prometía reunir a simpatizantes de diferentes tendencias ideológicas.
La tranquilidad se vio interrumpida cuando un hombre de 24 años, identificado como Daniel Ashpes, fue arrestado el 17 de octubre. Ashpes fue acusado de enviar mensajes amenazantes a través de un sistema automatizado de confirmación de asistencia al evento. Las autoridades recibieron alertas sobre los mensajes, lo que llevó a una investigación que culminó en la detención de Ashpes. Durante una entrevista posterior a su arresto, Ashpes admitió haber enviado los mensajes.
Los cargos que enfrenta Ashpes incluyen tres por amenazar con causar daño físico a otra persona y uno por utilizar un teléfono para intimidar. El caso de Ashpes no es un hecho aislado. Las autoridades de Tempe han recalcado que este incidente refleja la creciente preocupación por la seguridad en eventos políticos. La polarización política en Estados Unidos ha generado un clima de tensión que se refleja en el aumento de amenazas e incidentes violentos. Este caso destaca la importancia de la comunicación responsable en las redes sociales y la necesidad de mantener un ambiente seguro durante los eventos políticos.