El estruendo, que despertó a los vecinos, se asemejó al impacto de un vehículo contra una vivienda, según Randy Phillips, quien fue uno de los primeros en presenciar el terrible suceso.
Al salir a la calle, Phillips se encontró con un panorama desolador: una casa envuelta en llamas, con el fuego alcanzando alturas considerables y extendiéndose rápidamente hacia el cielo. De inmediato, llamó al 911, mientras otros vecinos se unían a la escena para intentar controlar la situación.
El incendio, que consumió la casa por completo, dejó como saldo la muerte de dos personas. Las autoridades, tras extinguir las llamas, confirmaron que la causa de la explosión fue una fuga de gas propano. La Comisión de Ferrocarriles de Texas ya se encuentra investigando el incidente para determinar las circunstancias que llevaron al accidente.
Los vecinos, conmocionados por lo ocurrido, describieron a las víctimas como personas amables y que amaban su hogar. El impacto de la explosión fue tan fuerte que lanzó escombros hacia las propiedades vecinas, rompiendo una ventana en la casa de Phillips.
Si bien aún no se han revelado las identidades de las personas fallecidas, el jefe de bomberos del condado de Grayson, quien calificó el incidente como un accidente, confirmó que la casa utilizaba propano para los electrodomésticos. Las investigaciones en curso buscan identificar el punto específico de la fuga de gas.