El mensaje, publicado en la red social Truth, fue vago pero contundente: "Se está hablando mucho sobre un masivo fraude en Filadelfia. ¡¡¡Vienen las fuerzas del orden!!!". La declaración, sin embargo, no se basaba en ningún tipo de evidencia.
Seth Bluestein, comisionado de Filadelfia, miembro del Partido Republicano, desmintió categóricamente las acusaciones de Trump. "Información absolutamente falsa", escribió en la red social X. "La afirmación (de Trump) es absolutamente falsa. Es un ejemplo más de desinformación. El voto en Filadelfia ha sido seguro".
Bluestein aseguró que el grupo de trabajo electoral del Ayuntamiento se mantiene en constante comunicación con el Comité Nacional Republicano, y que han respondido a todas las denuncias de irregularidades para garantizar que los ciudadanos de Filadelfia puedan votar con seguridad.
La acusación de Trump surgió temprano en la mañana, cuando un comunicado de su campaña mencionaba la expulsión de cuatro compromisarios republicanos de uno o varios centros de votación de la ciudad. Aunque no se especificaron los lugares, horas después, el equipo de Trump anunció que tres de ellos habían sido readmitidos. Sin embargo, la policía y las autoridades municipales no tenían registro de ningún incidente de este tipo.