Inflación en EE.UU. sube a 2.9% en agosto, presionando a la Fed antes de reunión clave

"El núcleo inflacionario, que excluye energía y alimentos, se mantuvo en 3.1%, pero la tendencia gradual al alza preocupa a los mercados", explicó un analista de Wall Street que pidió reserva. Los detalles revelan patrones interesantes:

• La vivienda sigue siendo el motor principal del alza mensual, con un incremento del 0.4%
• Los alimentos aceleraron su ritmo: de 0.3% en julio a 0.5% en agosto
• La gasolina dio un brinco del 1.9%, revirtiendo la caída de julio

Lo curioso aparece en los contrastes: mientras vehículos nuevos, viajes aéreos y ropa empujaron los índices hacia arriba, sectores como salud y comunicación mostraron leves descensos. Expertos señalan que esta presión selectiva refleja el impacto acumulado de los aranceles comerciales.

El termómetro financiero marca 37 grados de fiebre: con tipos de interés estancados entre 4.25% y 4.5% desde hace nueve meses, la Fed enfrenta el dilema de contener la inflación sin asfixiar el crecimiento. Todo esto ocurre mientras la Casa Blanca insiste en recortes más agresivos, creando un pulso silencioso entre la política y los tecnócratas.

El próximo capítulo se escribirá entre el 16 y 17 de septiembre, cuando el Comité de Mercado Abierto decida si mantiene el curso o cede a las presiones. Mientras tanto, las familias estadounidenses siguen sintiendo el peso de una canasta básica que cuesta 3.2% más que hace un año.

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