Recientemente, un conocido analista político, Rory Stewart, se encontró frente a una situación inesperada que dejó a muchos con la boca abierta.
Stewart, reconocido por su podcast "The Rest is Politics", se había atrevido a pronosticar una victoria contundente de Kamala Harris en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Su argumento se basaba en la fortaleza del gobierno de Biden, la pérdida de popularidad de Trump desde 2016 y la supuesta participación del voto joven afroamericano. Sin embargo, las cartas políticas se barajaron de forma distinta y Donald Trump logró revalidar su presidencia.
La reacción de Stewart no se hizo esperar. En un mensaje a sus seguidores, escribió: "Para que conste, estaba completamente equivocado sobre Kamala Harris. Es desgarrador que Trump sea ahora el presidente" . La ola de comentarios en redes sociales fue inevitable, calificando su predicción como "descarada" y acusándolo de "miopía". Incluso Andrew Neil, periodista a quien Stewart había criticado por su previsión de una elección reñida, le respondió con un lapidario: "Buenas noches Rory... " .
Este caso sirve como un recordatorio de que la política estadounidense es un terreno complejo, donde las expectativas y las predicciones pueden verse opacadas por la realidad. La relección de Trump, a pesar de las encuestas y las expectativas, dejó claro que el panorama político era más complejo de lo que se pensaba.