El fin de semana pasado, la ciudad de Nueva York albergó una de las carreras más icónicas del mundo: el Maratón de Nueva York. Más de 55,000 corredores se lanzaron a las calles para completar las 262 millas que recorren los cinco distritos de la ciudad. Entre ellos, un influencer de las redes sociales llamado Matthew Choi, quien corrió la maratón con un equipo de filmación que lo acompañaba en bicicletas eléctricas.
La polémica se desató cuando Choi fue descalificado de la competencia y se le prohibió participar en futuras carreras por violar las reglas de la competencia. La organización del maratón, New York Road Runners, acusó a Choi de obstruir a otros corredores con el equipo de filmación en bicicletas eléctricas.
Choi terminó la carrera en un tiempo de 2:57:15, un poco menos de 50 minutos después del ganador de la carrera masculina, Abdi Nageeye. Sin embargo, su desempeño pasó a segundo plano frente a la polémica que generó su uso de bicicletas eléctricas para filmar contenido durante la competencia.
El influencer reconoció su error en un video publicado en Instagram, disculpándose con los demás corredores y admitiendo que fue egoísta al convertir la carrera en algo que se trataba solo de él. Choi asegura que no volverá a participar en eventos de este tipo con un equipo de filmación en bicicletas eléctricas.
La decisión de la organización del maratón generó un debate en las redes sociales, con algunos usuarios criticando a Choi por su comportamiento y otros defendiendo su derecho a grabar contenido durante la carrera. Independientemente de las opiniones divididas, queda claro que el influencer deberá aprender una valiosa lección sobre la importancia de respetar las reglas y la comunidad durante eventos deportivos.