La magia de Harry Potter, muchas veces, se traduce en diversión familiar. Sin embargo, un evento con temática del mago más famoso del mundo, en un restaurante de Virginia Beach, tuvo un final amargo para una familia que buscaba celebrar el cumpleaños de su hija.
Grace Dowell, con su hija de siete años, decidió festejar en FishTails, un restaurante dentro del Ramada Inn at the Oceanfront, que organizaba una noche con pociones mágicas, algunas alcohólicas y otras sin alcohol. La familia pidió dos kits de pociones sin alcohol, pero su hija, al oler uno de los frascos, comenzó a vomitar. "Mi marido lo olió y dijo: 'Creo que esto es licor'", comentó Dowell.
Según Dowell, el camarero se disculpó, pero el dueño del restaurante, Rutvi Patel, afirma que el gerente se apresuró a corregir el error. "El gerente le dijo: 'Si no tiene una etiqueta, no es sin alcohol'", relató Patel. Dowell, por su parte, aseguró que el gerente no se mostró lo suficientemente comprensivo.
La situación se tornó tensa y, según Patel, Dowell se negó a pagar la cuenta. "Ella básicamente me dijo: 'Hola, ¿puedo saber cuál es el problema?', y eso fue todo lo que pudo decir antes de que alguien en la mesa comenzara a gritar que 'no voy a pagar ni un centavo de esto y bla, bla, bla'", afirmó Patel.
Dowell, por otro lado, señaló que el gerente se limitó a decir: "No sé cómo sucedió esto, no entiendo cómo sucedió esto", pero ninguna disculpa sincera.
El camarero se ofreció a pagar la cuenta de 70 dólares, que incluía los kits de pociones y las bebidas para adultos. A la mañana siguiente, Patel también devolvió a los Dowell la tarifa de reserva de 25 dólares.
Dowell, preocupada por la seguridad de su hija, decidió denunciar el incidente a la Junta de ABC, pues considera que la situación viola las normas de la entidad. FishTails, por su parte, asegura que está tomando medidas para evitar que esto vuelva a suceder.