El misil, conocido como Oreshnik, fue dirigido a un complejo militar-industrial en Ucrania. Según Putin, esta acción fue una respuesta directa al uso de armas de largo alcance por parte de Estados Unidos y el Reino Unido. “Las Fuerzas Armadas rusas lanzaron un ataque combinado contra una de las instalaciones del complejo militar-industrial de Ucrania”, afirmó el líder ruso.
En su mensaje, que se extendió por aproximadamente ocho minutos, Putin también abordó los recientes ataques en territorio ruso, donde se utilizaron misiles ATACMS y Storm Shadow. Estos ataques, dirigidos a la infraestructura militar en las regiones de Briansk y Kursk, fueron repelidos por las defensas antiaéreas rusas, según el mandatario. “No permitimos que el enemigo alcanzara sus objetivos”, subrayó.
Putin enfatizó que el uso de armas de largo alcance por parte de Kiev, tras recibir autorización de Occidente, no alterará el curso de la guerra. Aseguró que las fuerzas rusas están avanzando “a lo largo de toda la línea de contacto” en Ucrania y que todos los objetivos establecidos por Moscú serán cumplidos.
Además, el presidente ruso mencionó la reciente aprobación de una nueva doctrina nuclear, que contempla respuestas con armas atómicas en caso de ataques convencionales. Esta declaración subraya la gravedad de la situación y la postura firme de Rusia ante lo que considera una amenaza directa.