Pero, ¿qué es exactamente este misil que ha generado tanto revuelo?
El Oréshnik, un misil balístico ruso presentado por primera vez en combate, es capaz de alcanzar velocidades de Mach 10, equivalentes a 3 kilómetros por segundo. Según el presidente Vladímir Putin, esta arma es capaz de burlar cualquier sistema antimisiles occidental. "Putin está diciendo a Occidente: deténganse, retrocedan", comentó Sergei Markov, exasesor del Kremlin.
El Oréshnik forma parte de la nueva generación de armamento hipersónico ruso y está diseñado para portar ojivas nucleares con hasta seis cabezas de guiado individual. Esto le otorga una precisión milimétrica capaz de golpear objetivos a miles de kilómetros. Putin destacó que este desarrollo forma parte de los sistemas de armamento "sin igual en el mundo" que presentó en 2018.
El mensaje detrás del lanzamiento del Oréshnik es claro: una advertencia directa a Estados Unidos. Según Putin, Washington planea desplegar misiles en Europa y Asia Pacífico, acciones que Moscú considera una provocación que podría escalar a un conflicto global. Las acusaciones y amenazas de Putin no escatiman en señalar a EU como responsable del deterioro del sistema internacional de seguridad.
Ucrania y sus aliados occidentales observan con creciente preocupación la aparición de este misil, que podría cambiar drásticamente las reglas del juego. Analistas internacionales advierten que, más allá del impacto militar, el Oréshnik podría ser un instrumento geopolítico de presión en un escenario donde las tensiones ya han alcanzado niveles críticos.
Entre las características clave del Oréshnik se encuentran:
- Velocidad de Mach 10, equivalente a 3 kilómetros por segundo
- Capacidad para portar ojivas nucleares con hasta seis cabezas de guiado individual
- Precisión milimétrica capaz de golpear objetivos a miles de kilómetros