La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, explicó en la televisión pública RTVE que la nueva medida busca "regular de conformidad a la emergencia climática". Según Díaz, si una autoridad de emergencias indica que hay riesgo, el trabajador debe abstenerse de ir a trabajar. Esta medida forma parte de un paquete de medidas de prevención de riesgos adoptadas por el Consejo de Ministros.
La decisión del Gobierno español surge después de que varias empresas fueran criticadas por haber pedido a sus empleados que permanecieran en sus puestos de trabajo o se incorporaran a ellos pese a la alerta roja emitida por la Agencia Meteorológica Estatal (Aemet). Las empresas, a su vez, acusaron a las autoridades de no mantenerlas suficientemente informadas y de no enviar las alertas a los teléfonos celulares de los ciudadanos hasta la tarde.
La ministra Díaz enfatizó que "ningún trabajador debe correr riesgos" en situaciones similares. A partir de ahora, en caso de alerta por peligro meteorológico, los trabajadores podrán disfrutar de un permiso climático remunerado de hasta cuatro días. Las empresas tendrán la opción de recurrir a la jornada reducida, que ya existe en casos de fuerza mayor, una vez transcurrido este período.
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, destacó que los costos derivados de estos fenómenos podrían duplicarse "de aquí a 2050". En este sentido, el Gobierno ha decidido un nuevo paquete de ayudas para los damnificados de las inundaciones de 2.300 millones de euros. Según Cuerpo, "tenemos que seguir avanzando" en "ese esfuerzo de movilización, de financiación, de inversión para adaptarnos, y para ser más resilientes".