El parque, llamado Olive Street Park, se encuentra ubicado en la intersección de Olive Street y Third Avenue. Su diseño es único, con un camino en forma de cinta roja, símbolo de la lucha contra el VIH/SIDA. En el centro del parque se encuentran rocas conmemorativas que detallan la historia y el impacto del SIDA en San Diego.
El alcalde de San Diego, Todd Gloria, destacó la importancia de este memorial en la ceremonia de inauguración. "Olive Street Park es más que un parque, es un tributo vivo al amor, la resiliencia y la esperanza", dijo. "Hoy, al cortar esta cinta, abrimos este espacio como un lugar para la reflexión, la sanación y la alegría".
El parque también cuenta con un área de juegos para niños, equipo de fitness, jardinería, un bebedero y un mirador con vistas al cercano Maple Canyon. La segunda fase del proyecto, que ya está en marcha, consistirá en la instalación de una obra de arte que reconozca los nombres de las personas que perdieron la vida debido al SIDA.
Entre los asistentes a la ceremonia se encontraban personas que vivieron la epidemia de SIDA en San Diego durante sus momentos más oscuros. Nicole Murray-Ramirez, una de las fundadoras y actual presidenta del Comité Conmemorativo del SIDA de San Diego, habló sobre una de las primeras reuniones de líderes comunitarios sobre la propagación del virus entre la comunidad LGBTQ+ en la década de 1980.
La inauguración de este parque y memorial es un paso importante hacia la conmemoración de las víctimas del SIDA y la promoción de la conciencia sobre esta enfermedad. El parque Olive Street es un lugar de reflexión, sanación y alegría, y su memorial es un recordatorio de la importancia de la lucha contra el VIH/SIDA.