Según Megan Varcie, meteoróloga del Servicio Nacional de Meteorología en White Lake, "la combinación de nieve pesada y pegajosa que venía del lago, junto con vientos fuertes, creó las condiciones perfectas para que se formaran estos cilindros de nieve". Los vientos en la zona alcanzaron velocidades de hasta 40 mph, lo que permitió que la nieve se compactara y se formaran estos cilindros.
Janice Pantelleria explicó que su esposo fue el primero en notar los cilindros de nieve mientras limpiaba la entrada del garaje. "Al principio pensó que los niños habían hecho un par de bolas de nieve en el jardín, pero luego se dio cuenta de que estaban rodeando nuestra casa".
Las fotos de los cilindros de nieve compartidas por Janice Pantelleria en Facebook recibieron mucha atención. "Me alegra que a todos les gusten las fotos tanto como a nosotros nos gustó verlo en persona", dijo.
La formación de estos cilindros de nieve es un fenómeno meteorológico poco común, pero no es exclusivo de Michigan. Sin embargo, la combinación de condiciones climáticas y geográficas en la zona hizo que este evento fuera especialmente notable.
Los cilindros de nieve pueden formarse en áreas abiertas sin árboles, donde la nieve puede ser empujada por el viento y compactada. Aunque no es un fenómeno peligroso, es un recordatorio de la belleza y la complejidad de la naturaleza.