Algo inusual está ocurriendo, más allá de las fluctuaciones típicas.
El foco de atención se centra en la caída del Dow Jones, que el miércoles pasado experimentó una baja de aproximadamente 1,123 puntos (2.6%). Esta disminución no es un hecho aislado; se suma a una racha de 10 días consecutivos a la baja, la más larga desde 1974, cuando la presidencia de Gerald Ford lidiaba con una economía compleja.
Pero, ¿qué detonó esta situación? La respuesta se encuentra en las declaraciones de la Reserva Federal (FED). Si bien recortó las tasas de interés como se esperaba, su perspectiva para 2025 fue menos optimista de lo anticipado. En lugar de cuatro recortes, la FED ahora proyecta solo dos. Esto indica que la inflación, según sus proyecciones, se mantendrá alta por más tiempo del previsto. “El mercado se sintió decepcionado por la probable trayectoria futura de las tasas de interés,” comentó Chris Zaccarelli, CIO de Northlight Asset Management.
Este giro inesperado provocó una reacción en cadena. La incertidumbre sobre la futura política monetaria generó una venta masiva, afectando no solo al Dow, sino también al S&P 500 (-3%) y al Nasdaq Composite (-3.6%). Incluso el mercado de bonos sintió el impacto.
Algunos analistas señalan factores específicos que contribuyeron a la caída. UnitedHealth Group, por ejemplo, experimentó una baja del 15% este mes, afectando al Dow de manera significativa. Aunque el miércoles recuperó algo de terreno (3.3%), la caída previa, relacionada con la muerte del CEO Brian Thompson, pesó fuertemente. De igual forma, la reciente corrección en las acciones de Nvidia, a pesar de su impresionante crecimiento anual, también contribuyó al descenso.
A pesar de esta reciente caída, es importante recordar el panorama general. El Dow aún registra un aumento del 14% en 2024, un incremento superior a los 5,000 puntos. El mercado respondió inicialmente con optimismo a los resultados electorales, impulsado por las promesas de reducción de impuestos y burocracia. La situación, sin embargo, subraya la volatilidad inherente a los mercados y la importancia de un análisis cuidadoso de las perspectivas económicas.
La incertidumbre sigue presente. La reacción del mercado a las decisiones de la FED demuestra la complejidad del panorama económico actual y la dificultad en predecir su evolución a corto plazo.