El mes de noviembre registró una disminución notable en las detenciones de migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México. Según datos oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), el número de detenciones se ubicó por debajo de los 100,000 migrantes, un hito no visto desde enero de 2021, poco después del inicio del mandato del presidente Biden.
Específicamente, se reportaron alrededor de 46,610 detenciones entre los puertos de entrada en la frontera suroeste. A esto se suman otras 4,580 detenciones en los puertos de entrada, para un total de 51,190 detenciones en noviembre. Esta cifra representa una disminución del 18% con respecto a octubre y un descenso impresionante del 76% en comparación con noviembre del año pasado.
Estas reducciones se atribuyen, en parte, a las "restricciones al asilo impuestas por Joe Biden en junio pasado", según fuentes oficiales. La CBP detalla disminuciones mensuales específicas: un 19% en las detenciones de familias, un 18% en adultos solteros y un 2% en menores no acompañados.
Además, se destaca la reducción del tiempo de expulsión de migrantes, más de la mitad del promedio histórico, y el aumento del porcentaje de no ciudadanos procesados para expulsión acelerada, duplicando la cifra anterior. Incluso, el número de personas liberadas por la Patrulla Fronteriza para esperar procedimientos judiciales se ha reducido en un 70%.
El comisionado interino de la CBP, Troy Miller, atribuye estos resultados a una “coordinación con México y los países centroamericanos, acciones ejecutivas y esfuerzos de la Patrulla Fronteriza”. Este cambio de tendencia es significativo, considerando que Estados Unidos repatrió a más de 700,000 inmigrantes en el año fiscal 2024, la cifra más alta desde 2010.
De mantenerse esta tendencia a la baja en las detenciones, la administración Biden podría concluir su periodo con cifras similares a las de los últimos meses de la presidencia de Trump, que en septiembre de 2020 reportó 54,771 detenciones en la frontera con México.