Resulta que más de 12,000 cajas de caldo de pollo Great Value de Walmart están siendo retiradas del mercado. La noticia, inicialmente divulgada por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos) en diciembre, afecta a 2,023 cajas de caldo de pollo de 48 onzas, producidas por Tree House Foods. Estas cajas, vendidas en 242 tiendas Walmart en nueve estados, presentan un problema en su empaque que podría ocasionar contaminación bacteriana.
Para identificar las cajas afectadas, debes buscar el Código de Lote (Batch) 98F09234, el UPC de la unidad minorista 007874206684 y el UPC del estuche 078742066844. También, verifica que la fecha de "Mejor si se usa antes de" sea el 25 de marzo de 2026. Los estados afectados incluyen Alabama, Arkansas, Georgia, Louisiana, Misuri, Misisipi, Oklahoma, Tennessee y Texas.
"La salud y la seguridad de nuestros clientes siempre es nuestra principal prioridad," declaró un portavoz de Walmart en un comunicado. "Tan pronto como nos dimos cuenta del problema, tomamos medidas para retirar todos los productos afectados de las tiendas afectadas. Seguimos trabajando con el proveedor para investigar."
Aunque hasta el momento no se han reportado casos de enfermedad relacionados con este retiro del producto, Walmart recomienda desechar el caldo de pollo o devolverlo a la tienda para obtener un reembolso completo. Es importante destacar que, según expertos, la contaminación bacteriana puede no alterar el sabor, olor o apariencia del producto, haciendo aún más crucial la verificación del código de lote.
Este no es el único retiro de productos de Walmart recientemente. A finales de diciembre, también se anunció el retiro de brócoli congelado Marketside debido a una posible contaminación con Listeria monocytogenes, afectando a tiendas en 20 estados de Estados Unidos. La alerta se extiende a otros productos y refuerza la necesidad de una revisión cuidadosa de nuestros alimentos.
Este incidente pone de manifiesto la importancia de la vigilancia alimentaria y la rápida respuesta de las autoridades y las empresas ante posibles riesgos para la salud del consumidor. La transparencia y la comunicación oportuna son factores clave para minimizar los impactos de este tipo de situaciones.