Pero, ¿cómo se asegura el CBP (Customs and Border Protection) de que quienes ingresan con visas de turista no estén buscando empleo ilegalmente? El foco se centra en la inspección exhaustiva de documentación y una entrevista precisa con el viajero.
Una visa de turista, según el Departamento de Estado de EEUU, permite actividades como turismo, tratamientos médicos, o participación en eventos deportivos amateur, pero explícitamente prohíbe el trabajo remunerado. Este detalle es crucial, y su incumplimiento conlleva consecuencias legales.
El proceso de inspección del CBP, aunque puede parecer intrusivo, está diseñado para facilitar el acceso a quienes cumplen con las normativas. "No es la intención someter a los viajeros a un escrutinio injustificado," afirma el portal oficial del CBP. La clave reside en la evaluación del oficial de inmigración, quien utiliza su juicio profesional para determinar la necesidad de una revisión más profunda de la documentación y las intenciones del viajero.
Ahora bien, ¿qué sucede si uno ingresa a Estados Unidos con una visa de trabajo? En este caso, existen importantes derechos laborales garantizados. Entre ellos:
- Salario justo: El derecho a recibir una remuneración acorde al trabajo realizado, incluyendo el cumplimiento del salario mínimo federal.
- Libertad de discriminación: Prohibición de trato desigual por motivos de raza, género, religión, etc.
- Ambiente laboral seguro: Acceso a medidas de seguridad y salud ocupacional.
- Derecho a la sindicalización: La posibilidad de unirse a sindicatos para negociar mejoras laborales.
- Posibilidad de abandonar situaciones abusivas: Aunque implica la pérdida del estatus de la visa, permite buscar alternativas.