El foco de atención se centra en la administración Trump y su plan para implementar, el próximo lunes, diez órdenes ejecutivas relacionadas con la inmigración. Esto, según fuentes cercanas a la Casa Blanca, implicará una serie de acciones drásticas y de gran envergadura.
Entre las medidas más impactantes destaca la declaración de una emergencia nacional en la frontera. Esta decisión permitiría al Departamento de Defensa desplegar tropas del Ejército y la Guardia Nacional, aunque por ahora se desconoce la cantidad de efectivos y sus acciones específicas. “Dependerá del Departamento de Defensa tomar esas decisiones,” comentó un funcionario que pidió mantenerse en el anonimato.
Pero la situación no se limita a cuestiones militares. Se espera que la administración también tome medidas en materia de política migratoria interna. Se planea eliminar la política de "captura y liberación", deteniendo la práctica de liberar a los migrantes detenidos tras cruzar la frontera debido a la falta de espacio en los centros de detención del ICE. Esto implica un cambio radical en el procedimiento de control migratorio.
Además, se pretende reinstalar la política de "Permanecer en México", obligando a los solicitantes de asilo a esperar en territorio mexicano la resolución de sus casos. Si bien el funcionario no ofreció detalles sobre acuerdos con México, esta acción podría generar tensiones diplomáticas.
Otras medidas contempladas en las órdenes ejecutivas incluyen:
- La continuación de la construcción del muro fronterizo.
- La suspensión del reasentamiento de refugiados por un mínimo de cuatro meses.
- La designación de cárteles de la droga y pandillas como MS-13 y el Tren de Aragua, como organizaciones terroristas extranjeras.
- La eliminación de la ciudadanía por derecho de nacimiento, aunque la retroactividad de esta medida aún no se ha aclarado.