Protestas en Barnard College: Estudiantes ocupan edificios tras expulsiones

El epicentro del conflicto reside en la expulsión de tres estudiantes de Barnard por distribuir material considerado inapropiado durante una conferencia en la Universidad de Columbia. Este incidente, que ocurrió hace más de un mes, desencadenó una serie de manifestaciones que culminaron con la ocupación de dos edificios del campus.
La primera ocupación tuvo lugar en Milbank Hall. Aproximadamente 60 manifestantes irrumpieron en el edificio, pasando por alto la seguridad, para realizar una sentada en protesta por la expulsión de los estudiantes. La tensión aumentó considerablemente, con la presencia de la policía de Nueva York, incluyendo el Grupo de Respuesta Estratégica, monitoreando la situación de cerca. La sentada, que duró varias horas, concluyó pacíficamente después de que los funcionarios de Barnard emitieran una advertencia de posibles acciones adicionales.
Sin embargo, la situación no terminó ahí. Días después, decenas de manifestantes, en apoyo a la causa y con el fin de ejercer mayor presión, se dirigieron al Centro Milstein para la Enseñanza y el Aprendizaje, renombrándolo la "Zona Liberada Dr. Hussam Abu Safiya". Esta acción elevó aún más la tensión. La presidenta del colegio, Laura Rosenbury, emitió una declaración condenando la ocupación y prometiendo acciones disciplinarias contra los responsables. "Buscaremos enérgicamente la disciplina y otros remedios contra aquellos que ingresaron al edificio de manera forzosa e ilegítima, dañaron o destruyeron propiedades, ignoraron las expectativas de nuestra comunidad y violaron muchas políticas y reglas," declaró Rosenbury.
La universidad, por su parte, aseguró que el liderazgo y el equipo de seguridad están monitoreando la situación de cerca. El incidente plantea interrogantes sobre el equilibrio entre la libertad de expresión y las normas de convivencia en el ámbito universitario, y deja abierta la posibilidad de futuras acciones.
Detalles específicos sobre el contenido de los folletos distribuidos y las posibles consecuencias para los estudiantes expulsados aún están por verse. El incidente continua desarrollándose y su resolución podría sentar un precedente significativo en la política estudiantil del campus y más allá.