Tornado EF-2 devasta Burger King en Missouri; 13 sobrevivientes

Un ambiente tenso, propio de las antesalas de una tormenta severa, se respiraba en Villa Ridge, una tranquila localidad a 45 millas al suroeste de St. Louis. La rutina diaria se interrumpió abruptamente; la naturaleza, con su poder inclemente, se imponía.
El epicentro del caos: un Burger King en la salida de la Interestatal 44. No se trataba de una simple tormenta; un tornado EF-2, con su voraz danza destructora, azotó la zona, dejando un rastro de devastación a su paso. El video de aquel momento, que circula por internet, muestra la escena dramática: el tornado, una columna de viento furioso, iluminando el fondo mientras el cartel del Burger King, un símbolo de la vida cotidiana, se debatía contra la fuerza de la naturaleza.
En medio del vendaval, 13 personas, empleados y clientes, quedaron atrapadas en el único lugar que parecía ofrecer refugio: el baño del restaurante. El relato de Gabriella Breeding, gerente general del Burger King, es conmovedor. “Estaba hablando por teléfono con ellos mientras corría hacia la tienda; al mismo tiempo llamaba al 911”, recuerda. Al llegar, la escena era desoladora: el Burger King, parcialmente destruido; los bomberos, inicialmente, creían que no había nadie dentro.
Pero Gabriella insistió. Los gritos, la tenue luz de una linterna, rompieron el silencio de la tragedia incipiente. Los bomberos, siguiendo el rastro de esperanza, lograron rescatar a los 13 sobrevivientes, ilesos, de entre los escombros. Un coche de uno de los empleados quedó destrozado en el estacionamiento; cinco semirremolques volcaron en las cercanías, una imagen que resume la magnitud del desastre.
El saldo final de la furia meteorológica en Missouri es lamentable. Según la Patrulla de Carreteras del Estado de Missouri, al menos 12 personas perdieron la vida. El tornado EF-2 que azotó Villa Ridge recorrió 13 millas, dejando tras de sí un camino de destrucción hasta Wildwood, Missouri. El Burger King de Villa Ridge, según estimaciones, permanecerá cerrado entre tres y seis meses mientras se evalúan los daños y se decide si se repara o se reconstruye completamente. Mientras tanto, las cerca de 20 personas que trabajaban en ese local tendrán la opción de un traslado temporal a otras sucursales de la cadena.
La escena deja una profunda marca. Más allá de la infraestructura dañada, la historia resalta la resiliencia humana frente a la adversidad, la solidaridad en momentos de crisis y la fortuna de haber evitado una tragedia aún mayor.