Amenazas a Gal Gadot tras publicaciones de Rachel Zegler

En este caso, una controversia inesperada ha envuelto a dos actrices de renombre, poniendo de manifiesto las complejidades de la opinión pública y las consecuencias imprevistas de las redes sociales.
Gal Gadot, conocida mundialmente por su papel de Wonder Woman, y Rachel Zegler, la nueva Blancanieves de Disney, se encuentran en el centro de una polémica que ha generado una oleada de amenazas. Fuentes de Variety y The Hollywood Reporter apuntan a que las publicaciones políticas de Zegler en la plataforma X (antes Twitter) son el detonante principal. Una publicación en agosto pasado, donde Zegler expresaba su apoyo a una "Palestina libre", provocó una ola de reacciones.
Pero, ¿cómo se relaciona esto con las amenazas contra Gadot? Según los reportes, la actriz israelí, madre de cuatro hijos y ex-soldado de las Fuerzas de Defensa de Israel, se ha visto en el ojo del huracán. Se ha informado de un aumento significativo de las amenazas de muerte dirigidas a ella, presuntamente en respuesta a la postura política de Zegler y la asociación de Gadot con Israel. La situación se agravó a tal punto que Disney tuvo que intervenir, contratando seguridad privada para proteger a la actriz.
Zegler, de 23 años, aparentemente no comprendió inicialmente el alcance de sus publicaciones, generando una preocupación creciente entre los ejecutivos de Disney. A pesar de las advertencias, la joven actriz continuó con sus declaraciones políticas en redes sociales. Mientras tanto, Gadot, de 39 años, ha mantenido un perfil más bajo en sus redes, centrando sus publicaciones en la liberación de los rehenes de Hamas, evitando así entrar en el debate sobre Palestina.
El revuelo no se limita a las amenazas. La situación se hizo aún más visible cuando Gadot recibió una protesta de activistas pro-palestinos durante la ceremonia de su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. Este incidente subraya la polarización generada por el remake de Blancanieves, una película que ya enfrentaba críticas por otros aspectos, incluyendo las discusiones sobre la inclusión en el elenco (incluso Peter Dinklage y Jason Acuña cuestionaron la decisión de no incluir actores con enanismo) y un presupuesto que superó los 270 millones de dólares.
La controversia resalta los desafíos que enfrentan las figuras públicas en la era de las redes sociales, donde una simple publicación puede tener consecuencias impredecibles e impactantes.