Kosovo acepta deportados de Estados Unidos tras polémico acuerdo con Washington

El primer ministro saliente de Kosovo, Albin Kurti, hizo un anuncio el pasado miércoles que ha generado diversas interpretaciones. A través de un mensaje en Facebook, se reveló un pacto con Estados Unidos, un "aliado inquebrantable", según las propias palabras de Kurti.
El acuerdo, que entrará en vigor durante un año, implica que Kosovo aceptará la deportación de hasta 50 ciudadanos de otros países expulsados de Estados Unidos. La selección de estos individuos se realizará a partir de una "lista propuesta" por Washington. Esta decisión llega en un contexto marcado por fuertes protestas en California contra las políticas migratorias, lo cual añade una capa extra de complejidad a la situación.
Este movimiento recuerda un acuerdo similar firmado meses atrás entre Kosovo y Dinamarca, en el cual Pristina se comprometió a albergar a presos extranjeros condenados en Dinamarca. Sin embargo, el acuerdo con Estados Unidos tiene una significancia particular para Kosovo. Para Pristina, es una oportunidad para expresar su "agradecimiento eterno" a Estados Unidos por su apoyo a la independencia de Kosovo, un territorio otrora provincia serbia, declarada independiente en 2008. Este agradecimiento se refleja palpablemente en la capital, Pristina, donde abundan las banderas estadounidenses y se homenajean figuras como George W. Bush y Bill Clinton con avenidas y monumentos.
Los detalles específicos de los migrantes que serán deportados, así como las condiciones de su acogida en Kosovo, aún no han sido completamente revelados. La situación permanece dinámica y su evolución en los próximos meses será objeto de seguimiento en los medios internacionales.