Agente pide a ciudadano detallarle hospital de nacimiento y retiene su ID en Los Ángeles

El centro de la controversia es Brian Gavidia, dueño de El Guapo Auto Sales, quien relató una experiencia profundamente perturbadora. El jueves pasado, mientras se encontraba en Montebello, fue detenido por un agente de la Patrulla Fronteriza. Según su testimonio, recogido por Los Angeles Times, el agente lo empujó contra una valla y le exigió probar su ciudadanía estadounidense.
La solicitud del agente fue tan inusual como impactante: "¿En qué hospital naciste?", le preguntó. "No lo sé," respondió Gavidia, "Nací aquí en Estados Unidos, en el este de Los Ángeles, amigo. Te acabo de demostrar que tengo una identificación real aquí". A pesar de presentar su identificación, el agente se la retuvo, según afirma Gavidia.
El incidente, capturado en video por un amigo de Gavidia y difundido en redes sociales, muestra a dos agentes sujetando a Gavidia contra una valla. En el video, se escucha a Gavidia gritar: “¡Soy estadounidense, hermano!” El propietario de El Guapo Auto Sales aseguró al Times que el agente le retorció el brazo y que la experiencia lo dejó conmocionado y temeroso por su vida.
Gavidia, visiblemente afectado, denunció al Times: “Violó mis derechos como ciudadano estadounidense. Fue la peor experiencia que he tenido. Sinceramente, sentí que iba a morir. Literalmente, vació la recámara de su AR-15”. El relato también incluye la afirmación de que el agente, aparentemente, se basó en su apariencia física para sospechar de su legalidad: “Da miedo, caminar con piel morena, caminar sucio, al volver a casa del trabajo, hay muchas posibilidades de que te detengan”.
La serie de videos publicados por Gavidia en Instagram, luego compartidos en X por el periodista Pablo Manríquez, muestran la indignación ante lo que se percibe como un abuso de autoridad y discriminación racial. La narrativa de Gavidia destaca la angustia y la inseguridad que experimentan algunos miembros de la comunidad latina en Los Ángeles ante las acciones de las autoridades. La situación ha generado un amplio debate en la ciudad sobre las prácticas policiales y la protección de los derechos civiles.