Detenciones ICE en Montebello, California: temor y protestas por discriminación racial

Javier Ramírez, un ciudadano estadounidense de 32 años, y Jason Gavidia, de 29, se encontraban trabajando cuando una camioneta blanca, sin identificación visible, ingresó al estacionamiento. De ella descendieron agentes, sus rostros cubiertos, portando armas. Según testigos presenciales, la situación se tornó tensa rápidamente. El relato de Gavidia es escalofriante: “¡Yo nací aquí! ¡Soy estadounidense, hermano!”, gritó mientras era acorralado contra una reja, sometido a un interrogatorio sobre su lugar de nacimiento.
A pesar de mostrar su identificación, Gavidia experimentó momentos de terror. Afortunadamente, fue liberado. Sin embargo, la experiencia de Ramírez fue diferente. A pesar de haber afirmado su ciudadanía estadounidense y presentado su documentación, fue esposado y trasladado al Centro de Detención Metropolitano de Los Ángeles. Este evento ha generado una ola de conmoción y preocupación entre los residentes.
El abogado de Ramírez, Tomás De Jesús, ha denunciado una flagrante violación de los derechos constitucionales de su cliente. De Jesús afirma que los agentes “no mostraron ninguna orden judicial” ni ofrecieron “ninguna razón de por qué estaban allí”. La situación ha desatado una intensa controversia, con muchos cuestionando los criterios utilizados por el ICE en sus operativos.
El incidente, registrado en video y ampliamente difundido en redes sociales, ha intensificado el temor entre la comunidad latina de Montebello, donde, según The New York Times, el 80% de sus 63,000 habitantes son hispanos. El alcalde de Montebello, Salvador Melendez, expresó su frustración y enojo, señalando: “Vinieron aquí en busca de un aspecto concreto, que es el aspecto de nuestra comunidad latina. Van a detener a cualquiera que parezca latino…”. La preocupación se centra en la aparente discriminación racial y el temor a que se cuestionen las ciudadanías de personas con rasgos hispanos.
Las reacciones van desde la indignación hasta el miedo profundo, un sentimiento compartido por muchos latinos en la región. El incidente en el taller mecánico de Montebello ha puesto de relieve la vulnerabilidad que sienten algunos miembros de la comunidad, incluso aquellos con la ciudadanía estadounidense.