Republicanos ya mueven fichas para 2028 bajo la sombra de Trump

El panorama es complejo: "No hay ruta constitucional para que Trump busque un tercer mandato, pero ningún republicano ambicioso puede darse el lujo de desafiarlo abiertamente", explica un analista cercano a la cúpula partidista. La jugada consiste en mostrar lealtad al legado trumpista mientras se construye un perfil propio.
Entre los nombres que ya recorren estados clave como Iowa:
Los gobernadores de grandes estados republicanos —Ron DeSantis (Florida) y Greg Abbott (Texas)— apuestan por alinearse con las políticas más populares de Trump: seguridad fronteriza y deportaciones masivas. DeSantis, en particular, busca redimirse tras su fallida campaña de 2024.
El factor determinante será la sombra alargada de Trump. "Si el partido sufre una debacle en las legislativas de 2026, todo podría cambiar", advierte un estratega. Por ahora, el juego consiste en caminar sobre la cuerda floja: honrar al líder sin convertirse en meros imitadores.