En una preocupante declaración, el meteorólogo de la Confederación de Asociaciones Agrícolas en el Estado de Sinaloa (Caades), Ernesto Castro Castro, ha señalado que las presas de la región enfrentan un futuro incierto ante la sequía persistente. Según Castro Castro, las lluvias normales no serán suficientes para elevar el nivel de las presas al 60 por ciento necesario para implementar un plan de cultivos efectivo en el próximo ciclo agrícola. Solo un fenómeno natural, como un huracán golpeando la sierra, podría provocar el tan necesario escurrimiento en las cuencas.
El inicio de la temporada de huracanes el 15 de mayo aumenta la preocupación, ya que hasta el momento no se avistan fenómenos sobre el océano Pacífico. Sin embargo, el monitoreo se intensifica para mantener informada a la población sobre cualquier desarrollo.
La situación actual de sequía ha sido calificada como excepcional, con las presas alcanzando un preocupante 11.9 por ciento de su capacidad total, según reportes de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Ante esta alarmante realidad, las esperanzas recaen en cualquier indicio de actividad meteorológica, como la reciente observación de una zona nubosa cerca de las costas de El Salvador y Guatemala, que podría evolucionar en una depresión tropical.
La incertidumbre persiste, y solo el paso del tiempo revelará si Sinaloa será bendecido con el fenómeno natural que tanto necesita para aliviar su sequía.