Sheinbaum designa a Lázaro Cárdenas Batel como jefe de Oficina de la Presidencia

Claudia Sheinbaum, la virtual presidenta electa de México, ha presentado oficialmente a Lázaro Cárdenas Batel como el nuevo jefe de la Oficina de la Presidencia. Cárdenas Batel, hijo del conocido político Cuauhtémoc Cárdenas y nieto del expresidente Lázaro Cárdenas, se incorpora a este cargo que fue inhabilitado en el sexenio de López Obrador.

Presenté a Lázaro Cárdenas Batel como jefe de oficina de la Presidencia. pic.twitter.com/S0uv49dK18

— Dra. Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) July 11, 2024

Lázaro Cárdenas Batel estudió Etnohistoria en la Escuela Nacional de Antropología e Historia del Instituto Nacional de Antropología e Historia y ha tenido una carrera destacada, ocupando diversos puestos en el ámbito político. Entre los más notables se encuentran su trabajo como asesor de la Presidencia de la República durante el mandato de López Obrador y su gestión como gobernador de Michoacán entre 2002 y 2008. Además, ha sido senador, diputado federal y uno de los fundadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), junto a su padre Cuauhtémoc Cárdenas.

Sheinbaum mencionó la importancia que tendrá el regreso de la Oficina de la Presidencia de la mano de Cárdenas Batel, destacando la habilidad de este para liderar con visión y eficiencia, apoyando al Ejecutivo federal en la transformación de México hacia una nación más justa y democrática. Ella afirmó: 

Conozco a Lázaro desde hace muchísimos años. No solamente somos compañeros y amigos, sino que ha desempeñado cargos importantísimos que le permiten coordinar nuestra oficina. Mencionó Sheinbaum desde su casa de transición

Cuando se le preguntó sobre el significado de asumir este cargo, Cárdenas Batel expresó:

Para mí representa un honor altísimo porque el nombramiento viene de quién viene, porque es un espacio cercano, un espacio que implica confianza y un espacio desde donde creo podemos seguir aportando al país, dijo Cárdenas Batel.

El nombramiento de Cárdenas Batel no solo marca el regreso de la Oficina de la Presidencia y su reingreso al ámbito político tras su renuncia como asesor del presidente López Obrador, sino que también representa la continuidad del legado político de su familia.

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