Culiacán se ha visto envuelta en un nuevo capítulo de violencia, dejando una atmósfera de incertidumbre en la ciudad. Un hecho que pone de manifiesto la fragilidad de la seguridad en la capital sinaloense.
El escenario del incidente: el estacionamiento de un supermercado, un espacio que representa la cotidianidad y la tranquilidad, se ha convertido en un lugar de miedo y agresión.
En este espacio, un hombre de 69 años, identificado como Jesús Alfonso N, fue víctima de un brutal asalto que culminó en el robo de su vehículo. El ataque, que se produjo la tarde del domingo 10 de noviembre, dejó una huella sangrienta en el asfalto: 7 casquillos percutidos de arma corta, encontrados por los investigadores de la Fiscalía General del Estado (FGE). La escena, meticulosamente documentada por la FGE, revela la brutalidad del acto y la urgencia de encontrar a los responsables.
Los detalles del estado de salud de la víctima aún no se han revelado, dejando un halo de incertidumbre sobre su situación. La investigación, que se encuentra en curso, busca reconstruir la secuencia de eventos, identificar a los agresores y dar con el paradero del vehículo robado.