Para contrarrestar esta situación, la Presidenta Claudia Sheinbaum, junto con el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, anunciaron una medida contundente: un aumento en los aranceles a las mercancías confeccionadas y textiles importadas. Este incremento, según Ebrard, busca frenar prácticas desleales que inundan el mercado con productos a precios irrisoriamente bajos.
El impacto de esta decisión es considerable. "Aumentamos a 35 por ciento el arancel a mercancías confeccionadas con precios increíblemente bajos; aumentamos 15 por ciento a las mercancías textiles", explicó Ebrard, enfatizando la intención de proteger a la industria nacional y combatir el abuso de ciertas prácticas comerciales.
El anuncio no se limita a la imposición de nuevos aranceles. Se trata de una estrategia integral contra el contrabando técnico y el fraude fiscal. Actualmente, existen 861 agentes aduanales activos en México. De este número, 40 presentan irregularidades, incluyendo el abuso de beneficios fiscales por parte de empresas certificadas y el ingreso de mercancías sin el pago de las contribuciones correspondientes.
Marcelo Ebrard reconoció las limitaciones de la fiscalización aduanal: “evidentemente la autoridad no puede verificar todas las importaciones. Se verifica entre hasta el 7 por ciento, es el promedio mundial.” Esta realidad subraya la necesidad de soluciones innovadoras.
En este contexto, la tecnología emerge como una herramienta clave. Iván Cárdenas, experto en tecnología y cofundador de BeGo, señaló: “hoy en día dependemos de inspecciones físicas y largas auditorías para detectar estas simulaciones. En BeGo hemos desarrollado algoritmos de inteligencia artificial para reducir el contrabando técnico y fraude fiscal”. Su empresa se posiciona como una solución para mejorar la eficiencia y efectividad de la fiscalización.
La situación del sector textil es alarmante: se estima una pérdida de 79 mil empleos en los últimos años, llegando a su nivel más bajo en 2024. Las medidas anunciadas buscan revertir esta tendencia y apuntalar la industria nacional, aunque el éxito dependerá de la eficaz implementación de las nuevas políticas y la efectiva aplicación de la tecnología para la fiscalización.