El incidente, lejos de ser un simple desacuerdo, revela una escalada de agresión que dejó a una empleada con quemaduras. La grabación, obtenida de una cámara de seguridad, muestra con crudeza la secuencia de eventos. Se observa a dos trabajadoras atendiendo el puesto, preparando quesadillas y gorditas, cuando de repente, una mujer irrumpe en la escena. Sin previo aviso, arroja un cazo con aceite hirviendo sobre una de las empleadas. La víctima, visiblemente sorprendida, sufre las consecuencias inmediatas del brutal ataque.
Las imágenes muestran la rápida reacción de las compañeras de la víctima, quienes intentan auxiliar a su colega, mientras el caos se apodera del lugar. Clientes y testigos intentan detener a la agresora, pero su huida, facilitada por otras mujeres que la acompañaban y un taxi que las esperaba, es exitosa. La situación se complica aún más cuando un joven que intenta perseguirlas, resbala en el aceite esparcido por el suelo, golpeando accidentalmente a otra trabajadora.
Según reportes de medios locales y testimonios de testigos, “el conflicto se originó por la negativa de las empleadas a dividir la cuenta entre varias clientas”. Esta situación, aparentemente trivial, desencadenó una reacción desproporcionada y violenta. La agresora, en lugar de resolver el conflicto de manera pacífica, regresó minutos después para perpetrar el ataque.
La víctima, quien permanece anónima por el momento, presenta quemaduras de primer y segundo grado y se encuentra en proceso de recuperación. Hasta el momento, las autoridades no han emitido un comunicado oficial sobre la detención de la agresora o sus acompañantes. El suceso ha generado un debate sobre la violencia en los espacios públicos y la importancia de una atención adecuada por parte de las autoridades.
El video, con sus detalles impactantes, ha generado una ola de comentarios en redes sociales. Muchos usuarios expresan su repudio al acto y exigen justicia para la víctima. Mientras tanto, la investigación continúa.