Pesadilla legal: Roban camioneta y la venden en agencia de autos usados

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Comprar un auto usado siempre conlleva un riesgo, pero pocos se imaginan enfrentar una situación como la de Aldo Manuel Sánchez Mora. La tranquilidad de adquirir un vehículo se transforma en una pesadilla burocrática y legal cuando la compra se hace bajo la sombra de un robo

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Nicol Matuz Scott el 07/01/2025 10:27 AM.
En México y editada el 07/01/2025 10:29 AM.

Hace tres semanas, en el municipio mexiquense de Coautitlán Izcalli, Aldo sufrió un asalto a mano armada. “Me rompe el cristal y me pone la pistola en la cabeza. Me golpea, me hinca y me dice que al final de cuentas ya me llevo la fregada,” recuerda con amargura. El resultado: el robo de su camioneta, el fruto de años de esfuerzo.

Pero la historia no termina ahí. Días después, buscando información en internet, Aldo descubrió algo impactante: su camioneta, con su número de serie único y registrado a su nombre, estaba a la venta en una agencia de autos usados en Puebla.

Decidido, Aldo viajó a Puebla. Con el duplicado de su llave, activó el sistema de la camioneta. Las luces se encendieron, confirmando sus peores sospechas. Al confrontar a la agencia, “ellos me comentan que se las vendieron a ellos,” explica Aldo. La intervención de la policía municipal de Puebla, tras la llamada al 911, confirmó la coincidencia del número de serie con su factura. La situación se complica al descubrir que la agencia compró el vehículo sin la factura original.

Aldo, con la frustración de tres semanas de trámites y poca respuesta de las autoridades de investigación, expone la situación: “¿Cómo es posible que tú compras una camioneta sin factura? O sea, yo cuento con mi factura y te estoy demostrando con la llave mi poder, que es mi camioneta.” La incertidumbre crece, ya que la camioneta sigue a la venta, representando un riesgo legal para cualquier comprador potencial.

Más allá del valor económico, Aldo subraya el significado sentimental del vehículo: “Son los ahorros de mi vida invertidos y mi marca para mi familia. Entonces no es justo que me haya sido arrebatada de esa forma.” El caso deja al descubierto las vulnerabilidades en el mercado de autos usados y la necesidad de mayor vigilancia y colaboración entre autoridades para evitar situaciones similares. El joven espera, con la esperanza de recuperar lo que considera injustamente arrebatado.