Para quienes cotizan bajo la Ley 97 del IMSS, es decir, aquellos que empezaron a cotizar después de 1997, hay un ajuste importante para el 2025. Este año, la cantidad de semanas cotizadas necesarias para acceder a una pensión ha subido significativamente.
De acuerdo con la Ley del Seguro Social, el requisito de semanas cotizadas se incrementa anualmente en 25, hasta llegar a las 1000 en 2031. Esto significa que en 2025 se requieren 850 semanas de cotización para poder optar por una pensión.
Pero la cantidad de semanas no es el único requisito. Para acceder a la pensión, los trabajadores deberán cumplir con lo siguiente:
- Edad: 60 a 64 años para Pensión por Cesantía; 65 años para Pensión por Vejez.
- Expediente de Identificación de Trabajador actualizado: Generado en la AFORE correspondiente.
- Documentación: Identificación oficial, estado de cuenta de la AFORE, estado de cuenta bancario con CLABE.
- Renta vitalicia: Pensión de por vida contratada con una aseguradora, cuyo monto depende del saldo en la AFORE y se actualiza anualmente.
- Retiro programado: Contratado con la AFORE, el monto depende del saldo, rendimientos y esperanza de vida. Los recursos se reciben hasta que se agotan.
- Pensión garantizada: El Estado otorga una pensión mínima a quienes cumplen con los requisitos de edad y semanas cotizadas, pero sus recursos no alcanzan para las dos opciones anteriores. "Es una red de seguridad para los trabajadores," explica la Consar.
La planificación para el retiro es un proceso que requiere atención a los detalles y anticipación. Conocer las normas y requisitos del IMSS es fundamental para tomar decisiones financieras informadas y asegurar un futuro más tranquilo.