El incidente ocurrió en el bulevar El Rosario, zona sur de Tijuana, cerca de la colonia Pórticos de San Antonio. No fue un robo, ni un asalto, sino algo aparentemente menor que escaló de forma dramática. Un percance vial común, uno de esos que ocurren a diario en el tráfico de la ciudad, terminó en un tiroteo.
La víctima: un perito de 39 años de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Baja California, especializado en balística. Salía de su trabajo, manejando su Nissan Sentra gris, cuando la situación se tornó violenta.
Según los reportes, un Toyota Matrix gris, conducido por dos jóvenes de 18 años, no recibió la preferencia de paso. La respuesta, lamentablemente, fue un disparo que impactó la espalda del perito. “Un incidente de tránsito que se salió de control”, comentó un testigo al medio local. El vehículo del perito también sufrió daños a causa del ataque.
El perito fue trasladado de emergencia a un hospital para recibir atención médica. Simultáneamente, la Policía Municipal activó un operativo, logrando ubicar el Toyota Matrix en la avenida Benito Juárez. Dentro del vehículo encontraron una pistola Ruger calibre .22 y un casquillo percutido, evidencias clave para la investigación.
Los dos jóvenes de 18 años, presuntos responsables, fueron detenidos y puestos a disposición de la fiscalía estatal. Ahora, se espera que se determine con exactitud la responsabilidad de cada uno en este hecho. La investigación prosigue para esclarecer los detalles y las circunstancias del suceso.
El incidente deja una profunda reflexión sobre la seguridad en las calles y el uso de la violencia para resolver conflictos menores. La rapidez con la que se detuvo a los responsables indica una eficiente colaboración entre las diferentes instancias policiales en la ciudad.