Albergues para migrantes deportados: México se prepara

Aunque el anuncio de 25 albergues oficiales para migrantes deportados de Estados Unidos generó expectativas, la información precisa sobre su ubicación aún es escasa. El plan, anunciado en diciembre pasado ante las declaraciones del expresidente Trump sobre deportaciones masivas, prevé la atención de un flujo migratorio potencialmente inmenso. “El proyecto comenzaría con un millón de exilios durante el primer año,” declaró en su momento un asesor de la administración Trump, lo que explica la magnitud de la preparación mexicana.
Tijuana, Baja California, se perfila como un punto crítico, con la necesidad de habilitar al menos seis de estos albergues. Sin embargo, la ubicación exacta de estos, así como de los restantes 19, permanece aún sin confirmar públicamente. Las autoridades estatales esperan la publicación oficial de estas localizaciones en los próximos días.
Mientras tanto, algunas zonas ya cuentan con infraestructura para recibir migrantes. En Chihuahua, existen albergues temporales con capacidad para 1370 personas, incluso se considera la posibilidad de habilitar el estadio Juárez Vive como campamento. En Coahuila, específicamente en el municipio de Sabinas (a 100 km de la frontera con Piedras Negras), se construirá un albergue con capacidad para recibir tanto a mexicanos como a migrantes de otras nacionalidades. Este albergue es una respuesta a las amenazas de deportación, pero también a las necesidades de una región donde la recepción de migrantes podría ser considerable.
Finalmente, Tamaulipas también ha acelerado la habilitación de espacios para atender la posible emergencia migratoria, con albergues con capacidad para aproximadamente 2500 personas cada uno. La preparación en varios estados refleja la gravedad con la que se anticipa esta situación.