El choque ocurrió alrededor de las 11 de la noche en la intersección de la avenida Hidalgo y calle González Herrera. Se vieron involucrados dos vehículos: una camioneta familiar color arena y un auto compacto negro, este último presuntamente conducido por un menor de edad. La fuerza del impacto fue considerable.
El resultado fue un efecto dominó de destrucción. El auto compacto, tras la colisión con la camioneta arena, impactó contra una camioneta pick-up estacionada. Pero ahí no terminó la cosa. La camioneta arena, por su parte, se estrelló contra la estructura metálica que sostenía una malla sombra de un negocio local, "Abarrotes Villa". El golpe fue tan fuerte que desprendió un neumático, el cual salió volando y terminó dentro de la misma tienda.
Afortunadamente, la intervención inmediata de los cuerpos de emergencia, incluyendo a la Cruz Roja Mexicana y la Unidad de Rescate Urbano, fue clave. Si bien se registraron tres jóvenes con lesiones leves que viajaban en el auto compacto, ninguno requirió hospitalización. Las heridas fueron superficiales, un alivio en medio del caos.
“Fue un golpe impresionante, parecía una película de acción”, comentó un testigo del accidente. La escena dejó a más de uno con la respiración entrecortada. Ahora, peritos de Matamoros llevan a cabo la investigación para determinar las responsabilidades y las sanciones correspondientes a los daños ocasionados.
Para prevenir situaciones como ésta, las autoridades recomiendan tomar en cuenta las siguientes medidas:
- Conducir a la velocidad adecuada, respetando los límites de velocidad.
- Mantener una distancia segura con el vehículo delantero.
- Estar atento a las condiciones del camino, incluyendo baches, obstáculos y el clima.
- Utilizar correctamente las señales de giro para indicar los cambios de dirección.
- Evitar las distracciones al volante, especialmente el uso de teléfonos celulares.